La presidenta brasilera, Dilma Rousseff, se encuentra negociando para generar una reunión extraordinaria de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) para abordar la crisis que afecta a Venezuela en Chile, aprovechando el viaje de los mandatarios para la asunción de la presidenta Michelle Bachelet.
La mandataria envió a Caracas a su asesor internacional Marco Aurelio García en momentos en que se conmemora el primer aniversario del fallecimiento de Hugo Chávez. Además instruyó a sus diplomáticos para que realicen “contactos discretos” con los gobiernos sudamericanos.
Rousseff está preocupada con la tensión creciente en Venezuela y estima que el bloque puede cumplir un papel “importante”, como ya lo hizo en 2008 frente a la crisis que desestabilizó al Gobierno de Evo Morales, dijo la periodista Monica Bergamo, del diario Folha de Sao Paulo, consigna La Tercera.