El primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, aseguró que su país está al borde del desastre. “Es una alerta roja. No es una amenaza, es de hecho una declaración de guerra a mi país”, dijo.
Ucrania anunció la movilización de sus reservistas luego de que Moscú amenazara con intervenir militarmente en el país.
Desde la comunidad internacional, el llamado al presidente Vladimir Putin ha sido a detener sus actividades militares. Así lo solicitaron desde la OTAN, donde consideraron una amenaza a la paz y la seguridad europea esta intervención rusa.
El parlamento ucraniano se reunió hoy en una sesión extraordinaria, a puerta cerrada, para abordar las medidas a tomar. Este sábado, a petición de Putin, el senado ruso autorizó desplegar a las fuerzas armadas en Crimea.
Estados Unidos exigió a Rusia retirar sus tropas de Crimea, si no quería verse expuesta a un mayor “aislamiento político y económico” a nivel internacional y a un “profundo” impacto en las relaciones con Washington.
Durante una conversación telefónica de 90 minutos, Barack Obama, le dijo a Putin que Moscú violó la ley internacional al desplegar soldados rusos en la península ucraniana.