Durante una rueda de prensa, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, admitió que las actividades de espionaje “tienen componentes negativos” y que “políticamente, por supuesto, debe limitarse el apetito de los servicios secretos”, sin embargo aceptó que siempre ha existido esta actividad, ya que “es una de las profesiones más antiguas del mundo”.
En cuanto a las críticas recibidas por Barack Obama en Europa debido a las escuchas de los aliados, el mandatario ruso reconoció: “Lo envidio. Lo envidio, ya que puede hacerlo y no le va a pasar nada”.
“Deben existir reglas más o menos comprensibles y acuerdos concretos, también de carácter moral”, resaltó citado por la agencia de noticias EFE.
Respecto al ex agente de la CIA, Edward Snowden recalcó que no lo conoce personalmente y que Rusia sólo le ha dado asilo, no apoyo político.
“No conozco personalmente al señor Snowden, es un hombre noble. Él debe decidir su futuro. En eso ni lo ayudamos, ni le ponemos trabas, simplemente le dimos asilo (…) No me es indiferente. Creo que gracias a Snowden mucho cambió en la cabeza de millones de personas, incluido en las de los más grandes dirigentes políticos de la actualidad”, afirmó Putin.
El mandatario negó que Rusia tenga algún conocimiento sobre la información privilegiada a la que tuvo acceso el norteamericano, al que recordó que como condición para permanecer en Rusia debe abstenerse de realizar actividades contra los intereses de Estados Unidos.