Dos chilenos fueron detenidos hoy en España como presuntos autores de la colocación de un artefacto que estalló en la Basílica del Pilar de Zaragoza, España, el pasado 2 de octubre. Ambos fueron identificados desde el Ministerio del Interior español con las iniciales F.S.D y M.C.S.
En Santiago, fuentes de gobierno indicaron a Radio Duna que se trata de Fernando Solar y Mónica Caballero, ambos implicados en el bullado caso Bombas, del cual fueron sobreseídos.
El titular del Interior hispano, Jorge Fernández Díaz, afirmó que los dos detenidos formaban parte de un comando anarquista muy bien organizado, “extremadamente peligroso” y con fuertes conexiones internacionales. Y añadió que ambos “son muy conocidos por su historial delictivo en Chile”.
Solar y Caballero eran parte de los 14 implicados en el caso Bombas que resultaron absueltos por la justicia, tras desechar más de 4.000 evidencias. Las detonaciones comenzaron en enero de 2006 y a enero de 2009 ya se contabilizaban más de 30 bombazos. Ambos detenidos también fueron señalados como parte del atentado contra la Iglesia de Los Sacramentinos, en el centro de Santiago. En su defensa, el abogado Mauricio Daza descartó cualquier vinculación con la colocación de bombas ya acusó un montaje por parte del ministro de Interior de la época, Rodrigo Hinzpeter.
En España, el artefacto provocó una fuerte explosión en el pasillo central del templo, sin causar heridos. El “Comando Insurreccional Mateo Morral” asumió la autoría, mismo grupo que se atribuyó la colocación de un artefacto en la catedral de La Almudena de Madrid, en febrero.