En la reunión anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) que se celebra esta semana en Washington, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, afirmó que “se está jugando con fuego” en Estados Unidos con la actual crisis fiscal, que amenaza a la primera economía global, y que tendría catastróficas implicaciones en el resto del mundo.
“Se está jugando con fuego, es irresponsable, se está poniendo en juego a la primera economía global”, indicó Larraín.
El secretario de Estado destacó que Chile tiene una “posición fiscal sólida” que le permitirá hacer frente a la “desaceleración” de China y al inicio de la retirada del estímulo monetario por parte de la Reserva Federal de EE.UU.
“Pero para el default de EE.UU. no, eso es un problema de otra envergadura”, advirtió.
Larraín se refería así a la incertidumbre en EE.UU. acerca del tope de deuda federal de 16,7 billones de dólares que se alcanzará el próximo 17 de octubre, y que amenaza con obligar al país a declararse en suspensión parcial de pagos.
No obstante, se mostró esperanzado en que si no se da “el escenario catastrófico, vamos a tener a EE.UU. con un crecimiento mejor” lo que provocará un contexto exterior “más benigno”.
En sus últimas previsiones económicas, el Fondo situó el crecimiento estimado para Chile en un 4,4% este año y en un 4,5% para el próximo.