Giusi Nicolini, la alcaldesa de la isla italiana de Lampedusa, al sur de Sicilia, confirmó el naufragio de una barcaza donde viajaban 500 inmigrantes indocumentados. 250 están desaparecidos además que 93 personas habrían fallecido. Sin embargo, la cifra de muertos puede será mayor “pues el mar está lleno de cuerpos”, ha dicho la edil.
Nicolini también informó a los medios italianos que, entre los sobrevivientes, las fuerzas del orden detuvieron a una persona que creen puede ser el traficante que los llevaba.
“Es un horror. No dejan de llegar barcos y descargar muertos. Los medios de comunicación tienen que venir a ver esto. Es impresionante”, agregó la alcaldesa entre lágrimas mientras hablaba por teléfono periodistas de la televisión local.
Según los relatos de los sobrevivientes, llevaban varias horas en alta mar sin conseguir llamar para ser rescatados. Por ese motivo decidieron encender fuego para ser localizados, pero la barcaza se incendió y muchos inmigrantes tuvieron que arrojarse al mar ya que la embarcación terminó volcándose.
La Guardia Costera italiana y la Policía de Finanza y Fronteras italiana (Guardia di Finanza) intervienen en el rescate, al que también se han unido barcos pesqueros y lanchas privadas.