En el pleno de la Corte Suprema, pasadas las 13 horas de hoy, el presidente de la institución, Rubén Ballesteros, reconoció explícitamente que hubo omisión del máximo tribunal durante la dictadura, pero declinó a pedir perdón.
La declaración viene un día después de la publicación de un comunicado por parte de la Asociación Nacional de Magistrados del Poder Judicial, donde se pide “perdón” por sus “omisiones” durante el régimen militar.
Este jueves, Ballesteros había declarado que de todas formas los jueces hacen uso de su derecho constitucional al solicitar que el máximo tribunal pida perdón de manera institucional por sus acciones y omisiones durante la dictadura.
Entre sus declaraciones, el presidente de la Suprema dijo que “las omisiones constituyeron una dejación de funciones” y que al hacer esto, “La Corte Suprema no ejerció el liderazgo que le correspondía”.