La guerrilla colombiana había suspendido los diálogos de paz pero el repudio internacional y la presión del presidente Juan Manuel Santos, quien les aseguró que “el tiempo se agotaba”, los hizo revertirsu decisión.
Las negociaciones finalmente serán este lunes 26 de abril.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Gobierno (Farc) anunciaron este viernes una “pausa” en los diálogos de paz que se realizan en La Habana, para analizar el referendo ante un eventual acuerdo de paz con el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos, según informa el diario El Espectador.
La guerrilla señaló que se levantará momentáneamente de la mesa para discutir los alcances de esa iniciativa que el gobierno de Santos y los presidentes de los partidos que lo apoyan (Partido de la U, Conservador, Liberal, Cambio Radical y Partido Verde) presentaron ante la Secretaría del Senado, un proyecto de ley para que el referendo sobre un eventual acuerdo de paz coincida con las elecciones que el país celebrará en marzo y mayo de 2014.
La responsabilidad asumida por la guerrilla de las FARC en la violencia desatada en Colombia en los últimos 50 años contribuirá a un proceso de reconciliación nacional en el que los rebeldes apuntan, además de un perdón, a sentar las bases para entrar de lleno en la política cuando se firme la paz.
Este es uno de los aspectos sensibles de las negociaciones de paz que se adelantan en La Habana, pero que aumenta las dudas sobre cómo los rebeldes pagarán sus crímenes.
Para las FARC ese resarcimiento deberá incluir “la obligación para las partes del perdón colectivo, a efectos de que una vez alcanzada la paz definitiva -de llegarse a ella- nos obliguemos todos a ‘nunca más'”.
De esa forma los negociadores rebeldes mantienen en alza su bandera del “perdón colectivo” que buscaría, según los críticos del diálogo, que los culpables de asesinatos no paguen sus delitos, un hecho que rechaza la mayoría del país.