Decenas de muertos deja el “viernes de protestas” en Egipto

En Egipto se vive por estas horas máxima tensión por las protestas de miles de seguidores del depuesto presidente Mohamed Mursi que han salido a las calles de varias ciudades, en respuesta al llamamiento de los Hermanos Musulmanes a una gran manifestación nacional, en protesta por la matanza que supuso el desalojo de los campamentos islamistas de varias plazas en El Cairo, con 638 muertos y 3.994 heridos, según las cifras oficiales.

Nada más arrancar las protestas fuentes gubernamentales han confirmado la muerte de cinco manifestantes islamistas -muertos en la ciudad de Ismailiya (junto al canal de Suez) por los disparos del Ejército- y de un policía fallecido durante una emboscada en un puesto de control de las afueras de El Cairo. Asimismo, fuentes médicas citadas por Reuters han asegurado que ocho manifestantes han sido abatidos en la ciudad de Damietta.  En paralelo, en la localidad de Alejandría, junto a la costa del Mediterráneo, se desencadenaron choques y un intenso tiroteo entre los islamistas y los contrarios a Mursi en el distrito de Sidi Bishr, sin que por el momento haya víctimas, según la agencia de noticias estatal Mena. En esos disturbios, se emplean armas de fuego y cócteles molotov.

En El Cairo, han comenzado a lanzar gases lacrimógenos en la principal plaza de la capital -donde miles de seguidores de Mursi protestan- y se han escuchado disparos en varios barrios de la ciudad. Dos testigos aseguraron a Reuters que vieron cómo los manifestantes lanzaban cócteles molotov a una comisaría cercana a la plaza. A través de la televisión estatal, se aseguró -como ya hiciera el día anterior- que el Ejército y la Policía responderán con firmeza a cualquier violación de la ley.