«Me equivoqué. Lo lamento, pero así fue. Me equivoqué al mantener la confianza en alguien que ahora sabemos que no la merecía». El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha asumido de esta forma su error al confiar en el ex tesorero del Partido popular, Luis Bárcenas, embaucado en un caso de corrupción que incluye sobresueldos a miembros del partido del mandatario y millonarias en Suiza sin declarar.
El presidente de España ha comparecido hoy ante el Senado para dar explicaciones sobre el caso Bárcenas y para hacer un balance de la situación política y económica, aunque el debate ha estado centrado en el chantaje fallido del extesorero del PP.
Mientras tanto, el PSOE mantiene su posición de exigirle que dimita , pero Rajoy ha aclarado en su segundo turno que no lo hará, porque no es culpable, y que tampoco convocará a elecciones anticipadas.
«He reconocido un error, mi error, y he respondido con el rechazo a todas las acusaciones vertidas por el señor Bárcenas y que están sub iudice. Se ha causado un daño grave a la imagen de España que trataremos de corregir y de superar, manteniendo con firmeza el rumbo del Gobierno y dejando trabajar a la justicia», aseguró el mandatario.