El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aprobó la liberación de 104 presos palestinos que cumplen condena en Israel desde antes de los acuerdos de Oslo (1993), en una medida destinada a favorecer la reanudación del diálogo en el Medio Oriente.
Tras las negociaciones del que tuvo a comienzos de julio el secretario de estado de EE.UU., John Kerry, con israelitas y palestinos, el gobierno israelí aprueba la primera propuesta para reactivar el proceso de paz, luego de que se hicieran los contactos preliminares comenzaran el martes en Washington.
La propuesta, que por ahora deja fuera a catorce presos palestinos que tienen la ciudadanía israelí, obtuvo trece votos a favor, siete en contra y dos abstenciones, ambos del Likud, el partido derechista que preside Netanyahu.
El primer ministro mantuvo intensas conversaciones telefónicas con los ministros más duros de su gobierno para convencerles de que votasen a favor.
“Hay momentos en los que hay que tomar decisiones difíciles por el bien del Estado y este es uno de ellos. Creo que la reanudación del proceso de paz en estos momentos es importante para Israel”, afirmó cuando les pidió su apoyo.
Sus principales opositores fueron integrantes del partido nacionalista Habayit Hayehudí, dirigido por el ministro de Industria y Comercio, Naftalí Benet. “Quien exige la liberación de asesinos no merece ser llamado socio (en un proceso de paz)”, dijo el ministro aludiendo al presidente palestino, Mahmud Abás.