Los militares egipcios han dado un ultimátum de 48 horas a los políticos para cumplir con las demandas del pueblo y sacar al país de la incertidumbre.
Si los líderes de las fuerzas islamistas y opositoras no llegan a un acuerdo en ese plazo, el Ejército anunciará una nueva hoja de ruta e impondrá ciertas medidas con la ayuda de todas las facciones en liza, con los jóvenes y sin excluir a nadie. Así lo ha anunciado este lunes la autoridad castrense en un comunicado leído por un portavoz del Ejército en la televisión estatal.
El terremoto de las protestas callejeras empieza a sentirse en el Gobierno de Mohamed Mursi. Cuatro ministros egipcios, del ala tecnócrata del Gabinete, han presentado este lunes su dimisión en apoyo a los manifestantes que, por cientos de miles, tomaron ayer las calles de varias provincias del país exigiendo la renuncia de Mursi.
Los titulares de Turismo, Medio Ambiente, Telecomunicaciones y Asuntos Jurídicos y Parlamentarios han enviado sus cartas de renuncia al primer ministro Hisham Qandil. El ministro de Turismo Hisham Zaazou ya amagó con marcharse hace unas semanas tras el fallido nombramiento de un miembro de la ex organización terrorista Al Gama al Islamiya como gobernador de Luxor. El islamista terminó renunciando al cargo ante el escándalo que ocasionó su llegada a la principal ciudad turística del sur del país.