El viernes recién pasado la CUT entregó al Ministerio de Hacienda su propuesta de reajuste del salario mínimo de $250.000. Uno de los principales argumentos para alcanzar dicha cifra, que hoy es de $193.000, es que el salario mínimo no ha tenido relación con el sostenido crecimiento económico del país y menos con el ingreso per cápita que se ubica sobre los US$18.500 dólares al año. “Es inconcebible que sea sólo el 0,02 por ciento de este ingreso per cápita en que se destina a salario mínimo”, dice la carta entregada a Hacienda.
La presidenta de la multigremial, Bárbara Figueroa, asegura que desde la Central manifestaron la voluntad de tener un diálogo formal y productivo frente al reajuste, sin embargo, confirma que hasta ahora el Ejecutivo no ha demostrado la misma disposición, y teme que un eventual ingreso del proyecto en julio al Congreso (mes en que debería regir el ingreso base), diluya la posibilidad de discusión entre las partes, y que se imponga el criterio del gobierno.
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