Rusia ha asegurado que los misiles antiaéreos S-300 que Moscú suministra al régimen sirio de Bashar Asad son un factor de contención contra una posible injerencia en el país árabe.
“Consideramos que tales pasos son en gran medida un factor de contención para impedir que algunas ‘cabezas calientes’ den a este conflicto […] un carácter internacional con participación de fuerzas externas”, afirmó Serguéi Riabkov, viceministro de Exteriores, citado por las agencias rusas.
El diplomático subrayó que los S-300 “son un factor estabilizador”, contradiciendo las afirmaciones del secretario de Estado norteamericano, John Kerry, que tachó esos misiles de factor desestabilizador.
‘El doble rasero de la UE’
El viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riábkov, declaró asimismo que el levantamiento de embargo de armas a la oposición siria por los socios europeos muestra su “doble rasero” y podría perjudicar la conferencia internacional sobre Siria propuesta por Moscú y Washington.
“Es reflejo de un doble rasero y un daño directo a los planes de convocar la conferencia internacional [sobre Siria] que acordaron el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, y el secretario de Estado estadounidense, John Kerry”, dijo Riabkov a la prensa, citado por la agencia Interfax.
Y agregó que la decisión de los Veintisiete está reñida con “el espíritu y la letra del Tratado Internacional sobre Comercio de Armas, que se abrirá para su firma el próximo 3 de junio”.