Que su origen está en los requisitos para otorgar bonos de carbono. Que era lo que se estilaba, en su minuto, en Europa. Que marca el umbral entre una central grande y una pequeña. Distintas son las razones que dan en la industria y a nivel político para explicar el origen del límite de 20 MW que establece la ley para reconocer como ERNC (y obtener los beneficios de la norma) a las centrales mini-hidro, pero no existe una versión consensuada.
Sin embargo, allí permanece en la ley. La norma de fomento a las ERNC, promulgada en 2008, no da mayores luces al respecto, por lo que hay que remitirse a la discusión parlamentaria. Entonces, lo que se planteó simplemente fue que las centrales menores a 20 MW generan menor impacto ambiental. Punto.
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