“Estamos estudiando seriamente retirarnos del Pacto de Bogotá. No nos vamos a resignar a lo que ha pasado”, afirmó la ministra de relaciones Exteriores colombiana, Ángela Holguín.
La posibilidad surgió como consecuencia del fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya que reconoció la soberanía de Colombia sobre los siete cayos del archipiélago de San Andrés que estaban en disputa con Nicaragua, pero extendió hacia el oriente la soberanía marítima de Nicaragua en el Caribe. La decisión salomónica perjudica al sector pesquero colombiano, cuyo espacio de trabajo pasará a manos nicaragüenses. De hecho, hasta el puesto de la propia funcionaria de Juan Manuel Santos pasó a ser discutido.
“Le estoy enviando una carta al secretario general de las Naciones Unidas, porque él es finalmente la cabeza de la organización (la CIJ pertenece a la ONU) y yo sí quiero manifestarle el descontento de Colombia, el vacío jurídico que hay en el fallo, las grandes repercusiones para los pobladores de San Andrés en todo sentido, la biosfera, una serie de elementos que creo que al secretario general le tienen que importar”, agregó Holguín.