El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha recortado en su reunión de este jueves en un cuarto de punto los tipos de interés, hasta un mínimo histórico del 0,75%.
La decisión se produce después de los avances logrados a nivel político en la eurozona durante la cumbre europea celebrada la semana pasada en Bruselas y de que este mismo jueves China haya decidido también una rebaja de tipos y el Banco de Inglaterra una inyección de 50.000 millones de libras en la economía británica.
Todos los movimientos en conjunto apuntan a una acción concertada de los bancos centrales para hacer frente a la crisis económica.
Se trata de la primera vez que la tasa cae por debajo del 1% desde la introducción del euro en 1999, por lo que el dinero para los bancos es ahora más barato que nunca.
Los analistas daban por hecho el paso acordado por el Consejo de Gobierno del BCE en Fráncfort, ante la amenaza de una mayor recesión en Europa y la menor presión de la inflación. Desde diciembre, la tasa estaba en el 1%.
La nueva rebaja suma una señal positiva a los mercados una semana después de la cumbre europea en Bruselas, donde los líderes del bloque acordaron la recapitalización directa de bancos en crisis, un pacto de crecimiento y avanzar hacia la unión bancaria.