De forma unánime, la sala del Senado aprobó el proyecto que modifica la ley 18.216 y que crea nuevas penas sustitutivas a la prisión, entre éstas la reclusión parcial y la libertad vigilada intensiva, que implica el seguimiento de condenados vía brazalete electrónico.
La iniciativa, impulsada por el Ejecutivo, fue aprobada con 32 votos a favor y ninguno en contra ni ninguna abstención, con lo que quedó lista para ser promulgada como ley.
Con esta nueva normativa, se sumarán cuatro nuevas penas alternativas que se sumarán a las tres ya existentes. Éstas son la reclusión parcial diurna, nocturna y de fin de semana (actualmente sólo existe la nocturna); la libertad vigilada intensiva; la prestación de servicios en beneficio de la comunidad y la