En Estados Unidos la interna republica vive hoy el llamado “super martes” donde Mitt Romney y Rick Santorum pelearán delegados de 10 estados entre ellos Alaska, Ohio, Oklahoma, Tennessee, que repartirán un tercio de los 1.144 delegados que necesita un candidato para obtener la nominación enla Convención Republicanade agosto.
Ohio es la clave para estas primarias y para las elecciones de noviembre. Desde 1944, sólo un candidato (John F. Kennedy) ha ganadola Casa Blancasin este estado. Rick Santorum era hasta hace unas horas el favorito en las encuestas aquí, pero ahora se enfrenta a un doloroso empate o incluso a una derrota.
Este estado obrero y, en parte, rural parece un feudo natural para el católico hijo de inmigrantes que se crió a pocos kilómetros de la frontera con Ohio, y no para el millonario que coqueteó con la izquierda como gobernador de Massachusetts. Pero la tendencia está cambiando y Romney, impulsado por sus victorias en Michigan, Arizona y Washington la semana pasada, ha recuperado el aura de ganador que tanto gusta al electorado estadounidense.
Entre los diez estados que votan este ‘supermartes’ electoral, Romney espera ganar también con facilidad en Massachusetts, Vermont, Virginia y Idaho. Si, además de estos estados, consigue rascar espacio en Ohio y Tennessee, otro estado sureño donde hasta ahora iba rezagado, su liderazgo será difícil de parar.