Aún no se confirma la causa de su muerte, pero la noticia ya es una conmoción mundial: A los 56 años falleció la cantante Sinead O’Connor.
Admirada por muchos, odiada por otros tantos, la voz de O’Connor resuena en todos. Cálida y de personalidad fuerte, la cantante fue un ícono de la irreverencia y rebeldía en los años 90, mismo año en el que su single “Nothing Compares 2 U” fue nombrado el sencillo número uno del mundo por los Billboard Music Awards.
Y fue ahí, en pleno auge de su carrera no se dejó callar y desafió a la Iglesia en ese inolvidable concierto en Saturday Night Live, en el que rompió una foto del Papa Juan Pablo II, lo que le valió ser vetada en muchas partes.
Conocido es que la salud mental de la cantante siempre había tenido altos y bajos. La artista que brilló en los noventa, fue salvada por la policía de un intento de suicidio en 2015, y convivió por años con la depresión y la bipolaridad. A esto, se sumó el golpe bajísimo del que no se pudo reponer. Hace 18 meses, su hijo Shane Lunny, de 17 años, se suicidó.
“La luz de mi vida, decidió terminar su angustia terrenal hoy y ahora está con Dios”, publicó la intérprete en su momento a través de su Twitter.
En 2018 la cantautora se transformó al Islam y cambió su nombre por Shuhada’ Davitt.
Aquí un Sintonía Crónica para recordarla
Y un documental imperdible
Mira Bien: “Nothing compares”, una vida en caída libre de Sinead O’Connor