Con un velorio lleno de flores y cientos de personas fue despedido el cantautor cubano Pablo Milanés.
El artista, que murió el lunes a los 79 años después de un largo cáncer, fue velado en la Casa de América de Madrid donde estaba su féretro junto a su icónica guitarra acústica, además de una fotografía con su retrato.
Entre las persona que lo fueron a despedir, también acudieron el ganador de los Grammy Latino, Jorge Drexler y el cantante argentino Fito Páez, quien dijo:
“Con certeza, hemos perdido uno de los más grandes artistas y compositores del siglo XX y el XXI también” y definió a Milanés como “su hermano”.
Agregando: “Era una máquina de hacer canciones perfectas” y contó que estaban preparando un disco de tangos que “lamentablemente” ya no se podrá concretar.
Massiel por su parte dijo “Pablo era tan humano, como una bolita de amor y de sensibilidad”.
“Era, junto a Silvio (Rodríguez), uno de los grandes trovadores de Cuba, realmente es una pérdida muy lamentable para todos los cubanos”, dijo a la AFP José Luis Matamoros, un cubano de 68 años residente en España que fue a despedir al artista.
De acuerdo a lo informado por la familia de Milanés, el cantautor será enterrado en España en “intimidad”.
“La familia agradece todo el cariño y el respeto que toda la sociedad y todos los sectores y la población tenían por Pablo. Todo el amor que en este momento se siente, lo agradece profundamente la familia”, comentó el cuñado del fallecido cantante.