Un libro que derriba algunos mitos sobre The Velvet Underground

En el 2004, el músico Joe Harvard publicó la primera versión del libro “The Velvet Underground & Nico” en inglés. Se trata de un trabajo que se distingue de otros realizados sobre la mítica banda punk, ya que fue escrito por un músico y contiene de primera fuente la explicación de la mayoría de los mitos, rumores y datos duros que giran en torno a los inicios del grupo liderado por Lou Reed.

Se preguntarán por qué un libro que salió a la luz hace 15 años adquiere relevancia por estos días. Y es que dos editoriales argentinas. Dobra Robota y Walden, lanzaron este año una coedición traducida de este libro, que, según un artículo de Culto de La Tercera, destaca porque “fluye, se deja leer y la traducción está a la altura”.

Como promete el título de esta nota, son varios los mitos sobre The Velvet Underground que derriba el texto. Uno de los primeros, es el que dice que fue una banda con un impacto inmediato en el rock estadounidense. Según escribe Harvard, “hasta el día de hoy, las radios mainstream prácticamente no pasan canciones de VU”, dejando en evidencia que se trató de una banda marginal, que figuraba como un fenómeno que la industria musical de los sesenta no supo tratar.

“Sumado a la falta de interés mostrada por la crítica, es fácil ver por qué VU, siempre luchando por sobrevivir, nunca recibió recompensa económica alguna”. se puede leer en el libro.

Del mismo modo, la formación inicial de The Velvet Underground también fue mítica. En aquel 1966 la banda estaba conformada por John Cale, proveniente desde la música clásica; Sterling Morrison, que Reed había conocido en Siracusa y que “consideraba que el rock debía generar en la gente ganas de destrozar todo”, revela el libro; Maureen “Moe” Tucker, quien imprimía simpleza en la batería y que “estaba por convertirse en una de las pocas bateristas completamente originales del rock”, y. por supuesto, Reed, quien se transformaría posteriormente en uno de los precursores del rock alternativo. También jugaría un rol importante como gestor Andy Warhol. 

El libro “The Velvet Underground & Nico” señala que fue el cineasta Paul Morrissey quien presentó a Warhol con la banda, a diferencia de lo que plantea el libro “Warhol” del filósofo del arte Arthur C. Danto, quien instala al artista pop en un rol inicial más protagónico.

“Apenas un tiempo antes el mismo Morrissey había logrado alquilar un club –gracias a la influencia de Warhol– y andaba buscando una banda fija para el local. Tras ver tocar a VU, creyó haberla encontrado”, especifica el libro. Fue así como Morrisey y Warhol asumieron el papel de representantes, y la banda comenzó a ser parte esencial de sus proyectos artísticos en The Factory.

Pero más allá de hacerlos parte de sus proyectos, lo más notable que lograron estos dos personajes con The Velvet Underground fue meterlos a un estudio y rescatar su sonido todavía fresco. Para ello, Warhol se ocupó de mantener a la mano de la industria alejada de las grabaciones, lo que Lou Reed consideró “como un paraguas que absorbía todos los ataques que recibíamos cuando no éramos lo suficientemente grandes aún como para ser atacados”.

Por su parte, Morrisey impuso la integración de Nico a la banda, e incluso dudó de la capacidad de Reed para liderar al grupo, por lo que la propuso a ella como cantante principal. Y Nico tenía atributos de sobra. Había grabado dos sencillos en Europa producidos por Jimmy Page, y en Estados Unidos el folk la había acercado al entonces incipiente Bob Dylan. Sin embargo, la idea no prosperó.

Es por esto, y por mucho más, que “The Velvet Underground & Nico” asoma como una publicación indispensable. Entre los temas más novedosos que toca, aparecen las distintas versiones sobre cómo se realizó la primera grabación de la banda, cuáles fueron las influencias de los músicos, quiénes fueron los nombres más desconocidos de su historia, cuál fue la ruta que recorrieron las grabaciones para llegar al producto final, desde dónde se inspiraron las letras, entre otros.