Durante dos décadas, Steve Perry y su particular timbre de voz se hicieron conocidos en el mundo entero liderando el proyecto musical soft rock Journey entre 1977 y 1998. Si bien en 1984 ya había editado su primer álbum en solitario, no fue hasta 1994, con el lanzamiento de For the Love of Strange Medicine, que Perry dio cuenta de su interés por darle forma a una carrera como solista.
Tras su partida definitiva la carrera de Perry tuvo pocos hitos, marcados más que nada por efímeras reuniones con antiguos miembros de su banda, por lo que el 2018 ha sido un año especialmente pródigo en su trabajo en solitario.
Así anunció Traces, su primer disco en 24 años y del cual ya conocemos dos canciones. En agosto estrenó “No erasin” y ahora es el turno de “No more cryin”, el segundo adelanto del disco que saldrá oficialmente el próximo 5 de octubre.