Pilar Abel: La mujer que asegura ser la hija de Salvador Dalí

FOTO: EFE.

A sus 61 años, la española podrá saber si efectivamente el famoso pintor es su padre, debido a que un tribunal de Madrid decretó exhumar el cuerpo del artista.

Desde 2007, Pilar Abel ha luchado para ser reconocida como la hija de uno de los pintores más importantes del XX, Salvador Dalí.

Desde que tenía 8 años, la mujer hoy de 61 años, aseguró que su familia le contó un gran secreto, que era la heredera de uno de los expositores más importantes del Surrealismo, consignó El Comercio.

El 2015, la supuesta hija de Dalí interpuso una demanda contra el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas de España y la Fundación Gala-Dalí, la cual fue aceptada por el Juzgado de Primera Instancia N° 11 de Madrid que decretó el lunes la exhumación del cuerpo del artista.

Abel presentó ante el tribunal unos documentos que demostrarían que entre la artista y la madre de la mujer hubo un romance clandestino.

Esta no es la primera vez que Abel intenta ser reconocida como la legítima hija de Dalí. En el 2007 y 2009 se sometió a pruebas de ADN, sin embargo, se desconocen los resultados de estas  y se cree que los insumos no tuvieron suficiente material genético para ser concluyentes. 

¿Quién es Pilar Abel?

La supuesta hija de Dalí se dedica a leer el tarot que la llevó a la televisión de Girona en España. Sin embargo, Abel no se hizo conocida por este oficio, sino por una demanda judicial (que fue rápidamente desestimada) en contra del escritor español Javier Cercas.

En una entrevista con Herrera Copeaseguró: “No voy a por dinero, quiero saber quien soy”. Asimismo, señaló que  lo más duro ha sido “que la gente no me crea y que me hayan escondido las pruebas que me he realizado”. 

De comprobarse que la tarotista es hija de Dalí, ella no solo tendría el derecho a llevar el apellido del artista, sino que recibiría unos 300 millones de euros (más de $225 mil millones). Según su abogado, Abel tendría derecho a dos tercios de la herencia del artista, que en su testamento, dejado en 1982, incluía casas, terrenos y obras (la colección más importante estaba compuesta por 75 piezas valorizadas en más de 17 millones de dólares).

Por su parte, la Fundación Gala-Dalí prepara un recurso para impedir la exhumación.